Antes conocido como Enfermedad maniaco – depresiva. Hoy se conoce como Trastorno Bipolar tipo I y tipo II y trastorno ciclotímico.

Ocasiona cambios dramáticos en el ánimo de quienes padecen el trastorno. Pueden ir de periodos de energía excesiva a irritabilidad extrema (hipomanía/manía), a la tristeza profunda y desesperanza (depresión). Teniendo en el medio periodos normales de ánimo (eutimia). Puede estar presente en más de un miembro de la familia. La edad de inicio habitual es entre la adolescencia tardía y la adultez temprana.

No tratar el trastorno bipolar puede ocasionar daño severo de las relaciones interpersonales, pobre desempeño escolar o laboral, consumo de drogas, incluso suicidio. Sin embargo existen tratamientos efectivos que siempre incluyen medicamentos y psicoterapia. El médico especialista en psiquiatría debe ser capaz de descartar enfermedades médicas que tengan impacto sobre el estado de ánimo y el comportamiento. A pesar de que el trastorno es crónico, en la mayoría de los casos puede controlarse bien siempre y cuando el paciente mantenga estricto apego al tratamiento medicamentoso.